Arte latinoamericano: esta obra es la más cara de Uruguay

La pintura en Uruguay fue una influencia contundente para el arte dentro de la región. Sin embargo, hubo un artista que logró resaltar por encima del resto de los referentes del ambiente uruguayo. 

El arte latinoamericano se extendió a lo largo de todo el mundo por las obras destacadas en los países más culturales de la región. Uruguay fue uno de ellos y es por eso que en esta nota te contamos cuáles es la pintura más cara subastada en el exterior. 

La pintura en Uruguay comienza a definirse a principios del siglo XIX con los pintores viajeros. Estos llegaban desde Europa para realizar dibujos y grabados a modo de crónicas de viaje que funcionaban como un registro de su experiencia por las tierras orientales. 

Es así como a principios del 1800 llegan desde su España natal artistas como Juan Manuel Besnes e Yrigoyen. La obra completa de este pintor estuvo integrada por óleos acuarelas y litografías, donde se utilizan espacios y momentos como el Sitio de Montevideo y la Guerra Grande. 

A fines del siglo XIX arriba otro referente: Carlos Federico Saez, quien adoptó las nuevas corrientes de la pintura europea e introdujo expresiones de pinceladas dinámicas y empastes densos. 

Luego de la época de Sáez destacan, segú los registros de la historia, otros personajes como Pedro Blanes Viale, Carlos María Herrera, Humberto Causa, entre otros que hicieron a la historia base de la pintura en Uruguay. 

Cada uno de ellos, en menor o mayor medida, utiliza la identidad local, regional y americana. Dichos aspectos fueron combinados con la técnica que traían estos artistas del Viejo Continente. 

Las obras, años después, fueron vendidas por millones y millones de dólares en el mercado norteamericano. 

La obra de arte más cara del Uruguay 

Si bien se pueden mencionar diversas obras que fueron vendidas en el mercado extranjero, una resaltó por sobre las demás: Pesaj, del artista José Gurvich. Se trata de un óleo sobre tela de 127×91 centímetros. 

Se subastó por 460.000 dólares y es una de las cifras más caras para las subastas en línea dentro de la región. Fue rematada en la casa de venta Castells y el récord era ocupado hasta 2021 por Joaquín Torres García. 

La obra de Gurcvich formaba parte de una colección bajo el nombre Bister-Pessaj y la misma estaba integrada por 87 pinturas. En ella también figuraban otros artistas como el propio Torres García, Pedro Figaria y Rafael Barrada, entre otros. 

La colección, según informó el local de subastas, había sido adquirida inicialmente por un matrimonio, quienes portaron la obra durante varias décadas. Luego, la pareja falleció y la familia decidió vender todas las obras que ellos habían coleccionado. 

Al momento de la transacción, la casa rematadora Castells informó que la obra iba a permanecer en Uruguay. Aseguró, además, que se trata de “una pieza de las más importantes de Gurvich y del arte uruguayo”. 

“Representa la Pascua judía, la festividad judía más importante que pintó Gurvich, y es la primera vez que sale una obra de estas a subasta”, agregan quienes conocieron más en detalle los datos importantes de esta pintura. 

José Gurvich, pilar del Uruguay y del arte latinoamericano

José Gurvich nació bajo el nombre de Zusmanas Gurvicius el 5 de enero de 1927 en Lituania. Era, sin embargo, hijo de dos padres uruguayos y por esa razón emigra al país oriental en 1932. 

El artista, por entonces un niño, viajó junto a su madre y su hermana. Su padre, gran influenciador en su vida, se encontraba en Uruguay desde hacía ya un año. 

Permaneció en el Barrio Sur de Montevideo y su familia, según cuentan los registros e historiadores, era de caracter humilde y de religión judía. En 1942 realizó el ingreso a la Escuela Nacional de Bellas Artes a dos de sus referentes que lo influenciarían para realizar un camino de pintor y artista.

Integró, además la Asociación de Arte Constructivo y fue un miembro fundamental del constructivismo uruguayo. 

A partir de la década del 50’, ya independizado, Gurvich comienza a viajar al exterior con files laborales y artísticos. Allí expone y vende parte de su obra en ciudades como Nueva York, Tel Aviv, Barcelona, Buenos Aires y Madrid.

El uruguayo, quien posee la pintura más cara, falleció el 24 de junio de 1974. En el año 2005 se abrieron las puertas del Museo Gurvich, un lugar donde residen las historias, registros y pinturas de uno de los referentes del arte latinoamericano. 

Se encuentra ubicado en Montevideo, la capital central de Uruguay. Tiene como principal objetivo la difusión y preservación de su obra mediante exposiciones y publicaciones sobre una buena parte de su vida.

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