El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires contiene diversas obras de teatro pertenecientes a autores históricos. Brasil, Argentina, Chile y otros países están representados a través de sus artistas.
El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) es una referencia para la cultura artística de la región. Es por es que te contamos las cinco obras que debes ver en caso de viajar a Argentina.
Por centros culturales como el MALBA es que Argentina puede ser llamada la capital del arte latinoamericano. Se trata de un museo argentino fundado en 2001 con el objetivo de preservar, coleccionar, estudiar y difundir las obras de arte del continente de habla hispana.
Es una institución privada, sin fines de lucro, que se define a si misma como un espacio “dinámico” donde día a día se presentan diferentes propuestas y trabajos, tanto de autores conocidos como de artistas pertenecientes al “under”.
Cuenta, además, con un importante programa de cine y con un área de Educación y Acción Cultural el cual incluye programas para niños, visitas guiadas y actividades con organizaciones de la sociedad civil.
El objetivo principal, en todos los casos, es el de ofrecer a todos los sectores de la comunidad una oportunidad para conocer a los artistas más destacados del país y del mundo.
Arte latinoamericano: 10 obras destacadas del MALBA
Las obras que sugeriremos a continuación serán ideales para visitar en familia. Muchas de ellas, incluso, se enfocan en el goce y disfrute de los más pequeños:
- Candombe, de Pedro Figari
El cuadro de Figari retrata el candombe, uno de los ritmos africanos más conocidos y nacidos durante la época colonial. Si bien la palabra representa “ceremonia” o “fiesta”, la obra tiene como objetivo acercar la música y la danza nativa a la gente.
Figari es mundialmente conocido como un “pintor de candombes”. En sus obras, retrató distintas escenas como personajes en el campo, bailes criollos, personajes en el circo, corridas de toros y paisajes de Venecia.
Según estiman los especialistas, el cuadro fue pintado alrededor de los años 30. La pintura cuenta con un equilibrio perfecto entre la solidez arquitectónica y la composición de los cuerpos que se pueden divisar en la imagen.
- Composición simétrica universal en blanco y negro, de Joaquín Torres García
La imagen de Joaquín Torres García muestra un dibujo con una asimetría casi perfecta entre cada una de sus partes. En ella, el artista busca representar la naturaleza, la vida urbana y la noción de totalidad.
Además, los recursos utilizados y elegidos por Torres García desembocaron en un buen resultado: espacios que se relacionan en perfecta armonía, una estructura monocromática pero simétrica y símbolos pictográficos con pinturas esquemáticas.
El movimiento utilizado en este tipo de obra de arte es el cubismo. Se trata de una técnica surgida en Francia que rompe con las leyes de la perspectiva clásica y descompone los objetos en estructuras geométricas.
- La canción del pueblo, de Emilio Pettoruti
En esta obra, el reconocido artista argentino retoma la serie de retratos hacia artistas callejeros. El trabajo lo había iniciado en 1920 con pinturas como “El flautista ciego”, una obra de arte que dibuja a un hombre de anteojos y bigote con habilidades para tocar la flauta.
En la canción del pueblo, en cambio, se retrata un trío de personas en el primer plano que tocan la guitarra, el bandoneón y cantan.
- Abaporú, de Tarsila do Amaral
El cuadro Abaporú, fue aquel que la artista Tarsila do Amaral le regaló a su marido y es considerado un ícono del arte brasileño. Se lo conoce como una de las obras de arte que inauguró la antropofagia.
El trabajo consistió en “canibalizar” el arte extranjero. Para los artistas sudamericanos, el antropofogismo representa la forma de combinar el arte y las ideas modernas con problemáticas indígenas.
Es considerado como un movimento esencial para la construcción del arte modernista brasileño. Es representado en su mayoría por personajes intelectuales o pintores. En esta línea, es clave el trabajo de Tarsila do Amaral, quien desarrolló una arte enraizado en sus orígenes.
- Autorretrato con Chango y Loro, de Frida Kahlo
Dentro del MALBA no puedes dejar de visitar los autorretratos de Frida Kahlo, una de las artistas más exitosas y reconocidas a nivel mundial por sus trabajos. La mexicana posee, junto a Diego Rivera, los récords de las obras de arte latinoamericanas más caras de la historia.
En este caso, como en muchos otros, Frida Kahlo se pintó a ella misma, ayudada por un espejo. La artista se encuentra acompañada en la imagen por Chango y Loro, un loro y un mono que parecen ser sus mascotas.
La pintura se da un marco en el que Kahlo intenta acelerar sus producciones debido al auge mediático y la repercusión que sus obras estaban logrando dentro del mercado estadounidense.